La libertad en las alas

La libertad en las alas

Envidio al sol

Envidio al sol

Tengo celos,
de cómo te toca el viento.

Envidio al sol,
porque te abriga con su calor.

Mi jardín esta triste
porque te codicia
como su más preciada flor.

Mis manos no perdonan al tiempo
porque tu piel
en el maldito después,
escapa de mis caricias.

Tengo celos cuando tus labios
se endulzan con caramelos.

Te amo y tengo miedo
de un día abrir los ojos
y hallarme perdido
sin que a mi lado,
no descanse tu cabello.

De Sol Elk

Sentir de nuevo

Sentir de nuevo

Las sábanas la extrañan,
el sudor y las manos
todavía la reclaman.

Mi corazón se esconde con lágrimas
en un imaginario cántaro de barro,
porque quiere sentir de nuevo
la libertad de surcar como un pájaro.

Espero un milagro,
acostado, sereno,
reviviendo como un poema
a cada uno de sus besos.

Con ella, la sensatez
nunca me quedaba despierta
vivía en una utopía, en un limbo
donde mi alma la esperaba
con sueños abierta.

Cuando llueve
ya mi piel no naufraga
ni navega,
pero se empieza a marchitar
porque necesita que ella venga.

Quiero escribirle “mis notas”
con feroz sinceridad
porque al lado de ella
jamás me vencerá la soledad.

Escondido en mis noches soñadoras
me atraviesan los clamores de su piel;
jamás seré un ángel
al que se le rompan las alas,
porque sé que el amor
no es tan solo una palabra al azar,
el amor es lo que nos convierte
en una metáfora balsa
arrojada con ilusiones a la mar...

Las sábanas la extrañan,
el sudor y mis manos

todavía la reclaman.

De Sol Elk